Invierno

 Ramas desnudas  bailan 

al compás del viento.

El sol alumbra apenas

entre nubes desdibujadas.

Se lentifica el tiempo

asoma el desasosiego

compás de espera que pone

alegrías y penas a fuego lento.

El atardecer se apaga de golpe 

se vuelve negro.

Imágenes cálidas se entremezclan

en el aire gélido

de  maderas, de leños y de lana.

La sopa caliente dibuja sobre la olla 

ilusiones y desazón,

las manos, lucen cenicientas.

Se aceleran los pasos y lo sentimientos.

Una brisa ataviada de nada

inunda la vereda húmeda

y solo queda  atravesar las calles

tiritando, silbando y soñando.

Con la nariz fría

el alma en vilo

el corazón latiendo fuerte

al ritmo de un destino incierto.



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